27 de Dhul Hiÿÿah de 1329 H.L.
Revisa la biografía del Profeta (s.a.w.) y lo encontrarás representando a ‘Alî y a Aarón como Al-Farqadân que se encuentran en el firmamento, y como los dos ojos de un rostro, donde ninguno se diferencia en nada del otro ante su comunidad.
¿Acaso no ves cómo no quiso que los nombres de los hijos de ‘Alî (a.s.) fueran sino como los nombres de los hijos de Aarón, de manera que los llamó Hasan, Husain y Muhsin,1 y dijo: “Por cierto que los he llamado con los nombres de los hijos de Aarón que eran Shubbar, Shubair y Mushbir”.2 Con ello quiso enfatizar la similitud entre los dos Aarones y generalizar la semejanza entre ambos en todas las posiciones que ostentaba Aarón y el resto de los asuntos que le eran pertinentes.
Es con esa misma finalidad que tomó a ‘Alî como su hermano, y mediante ello le prefirió por sobre los demás, como forma de establecer la generalidad de la similitud entre las posiciones de los dos Aarones en relación a sus respectivos hermanos -con todos ellos sea la paz-, y como forma de cuidar con fervor que no hubiera diferencia entre los dos.
Hermanó entre sus Compañeros dos veces como ya escuchaste, de manera que Abû Bakr y ‘Umar se hermanaron la primera vez,3 y ‘Uzmân se hermanó con ‘Abdurrahmân Ibn ‘Auf. En la segunda vez se hermanaron Abû Bakr y Jâriÿah Ibn Zaid, y ‘Umar se hermanó con ‘Utbân Ibn Mâlik.4
En cuanto a ‘Alî (a.s.), las dos veces se hermanó con el Mensajero de Dios (s.a.w.)5 como ya sabes. Nuestro espacio actual es restringido como para profundizar en todos los textos establecidos a través de vías de transmisión sahîh al respecto, de los siguientes compañeros: Ibn ‘Abbâs, Ibn ‘Umar, Zaid Ibn Arqam, Zaid Ibn Abî Awfâ, Anas Ibn Mâlik, Hudhaifah Ibn Al-Iamân, Majdûÿ Ibn Iazîd, ‘Umar Ibn Al-Jattâb, Al-Barâ’ Ibn ‘Âzib, ‘Alî Ibn Abî Tâlib, y otros6.
El Mensajero de Dios (s.a.w.) dijo: “Tú eres mi hermano en esta vida y en el Más Allá”.7
Ya mencionamos en la Carta 20 sus palabras cuando tomó de los hombros a ‘Alî y le dijo: “Por cierto que éste es mi hermano, mi sucesor y mi califa entre vosotros. ¡Escuchadle y obedecedle!”.8
Un día el Profeta (s.a.w.) salió a ver a sus Compañeros estando su rostro resplandeciente y ‘Abdurrahmân Ibn ‘Auf le preguntó al respecto y respondió: “Me han llegado albricias de mi Señor sobre mi hermano y primo y sobre mi hija; que Dios casó a ‘Alî con Fâtimah…”.9
Cuando se llevó a cabo el cortejo nupcial y matrimonio entre la señora de las Mujeres (Fátima) y el señor de la pura descendencia (‘Alî, con él sea la paz), dijo el Profeta (s.a.w.): “¡Oh Umm Aiman! Llama a mi hermano”. Ella dijo: “¿Es tu hermano y lo desposas con tu hija?”. El respondió: “¡Así es, oh Umm Aiman!”. Y ella lo llamó y él vino…”.10
¡Cuántas veces le señaló diciendo: “Éste es mi hermano, mi primo, mi yerno y el padre de mi descendencia”!11 Una vez se le dirigió diciéndole: “¡Tú eres mi hermano y mi compañero!”.12 Una vez le habló diciendo: “¡Tú eres mi hermano, mi compañero y mi acompañante en el Paraíso!”.13
Se le dirigió otra vez en una cuestión que se había dado entre él, su hermano Ÿa‘far y Zaid Ibn Hârizah, diciéndole: “En cuanto a ti ¡oh ‘Alî! Tú eres mi hermano, el padre de mi descendencia, eres de mí, y tu retorno es hacia mí…”.14 Una vez le encomendó cosas y le dijo: “Tú eres mi hermano y mi visir, pondrás en práctica mi religión, cumplirás con mis compromisos y harás que sean eximidas mis responsabilidades…”.15
Cuando se acercó el momento de su muerte –¡que mis padres hubieran sido sacrificados por él!- dijo: “¡Llamad a mi hermano!”. Y llamaron a ‘Alî. Le dijo: “Acércate a mí”. Él se acercó y le sostuvo en su regazo. Se mantuvo de esa manera hablándole hasta que falleció y salió un poco de saliva de su boca (s.a.w.).16 También dijo (s.a.w.): “Se encuentra escrito en la puerta del Paraíso: No hay divinidad más que Dios, Muhammad es el Mensajero de Dios, ‘Alî es el hermano del Mensajero de Dios…”.17
Reveló Dios la noche del mabît (cuando ‘Alî durmió en la cama del Profeta) a (los ángeles) Gabriel y Mikael: “Yo os he hermanado y he dispuesto que la vida de uno de vosotros sea más larga que la del otro. ¿Cuál de vosotros preferirá la vida para su compañero?”. Cada uno eligió la vida para sí mismo. Entonces Dios les reveló: “¿Acaso no seréis como ‘Alî Ibn Abî Tâlib, a quien Yo he hermanado con Muhammad (s.a.w.) y pernoctó en su cama para sacrificarse por él y preferir la vida para él? Descended a la Tierra y protegedle de sus enemigos”.
Descendieron y Gabriel se ubicó a su cabeza, y Mikael clamaba: “¡Bravo! ¡Bravo por ti! ¡Quién como tú, oh hijo de Abû Tâlib, que Dios se ufana de ti antes Sus ángeles!”. En ese momento Dios Altísimo reveló la aleya que dice: «Y entre la gente hay quien merca con su vida procurando la complacencia de Dios…».18
‘Alî solía decir: “Yo soy el siervo de Dios, el hermano de Su Mensajero y el gran veraz, y ello no lo pretenderá nadie más después de mí sino un mentiroso”.19 También dijo: “¡Por Dios que yo soy su hermano y su Walî, su primo y el heredero de su conocimiento. ¿Quién tiene más derecho a ello que yo?”.20
Dijo en el día de la Shûrâ (cuando fueron impuestas seis personas por ‘Umar para elegir a su sucesor) a ‘Uzmân, a Abdurrahmân Ibn ‘Awf, a Sa‘d y a Az-Zubair: “¡Os conmino por Dios! ¿Acaso hay entre vosotros alguien fuera de mí con quien el Mensajero de Dios se haya hermanado cuando él hermanó entre los musulmanes?”. Dijeron: “¡Por Dios que no!”.21
Y cuando venció a Al-Walîd el día de (la batalla de) Badr, éste le dijo: “¿Quién eres?”. Respondió: “Soy el siervo de Dios y el hermano del Mensajero de Dios…”.22
‘Alî le preguntó a ‘Umar durante los días del califato de éste último, diciéndole:23 “Si viniera a verte un grupo de personas de los Hijos de Israel, y una de ellas te dijera: “Yo soy el primo de Moisés”, ¿acaso le brindarías alguna preferencia por sobre sus compañeros?”. Dijo: “Sí”. Dijo el Imam: “¡Pues por Dios! que yo soy el hermano del Mensajero de Dios y su primo”.
Entonces ‘Umar se quitó la capa y la extendió, luego dijo: “¡Por Dios! que no te sentarás en otro lugar más que aquí mientras estemos juntos”. Y permaneció sentado sobre la misma y ‘Umar frente a él hasta que terminó su reunión, como reconocimiento al hermano y primo del Mensajero de Dios.24
La pluma nos lleva lejos de manera que decimos: y ordenó (s.a.w.) clausurar las puertas de los Compañeros que daban a la Mezquita para mantenerla indemne de la polución e impureza ritual (ÿanâbah), sólo que dejó que permaneciera abierta la puerta de ‘Alî y le permitió por parte de Dios Altísimo poder estar en estado de polución por intimidad matrimonial en la Mezquita, tal como le era permitido a Aarón; esto mismo nos indica la generalidad de la similitud entre los dos Aarones, con ambos sea la paz.
Dijo Ibn ‘Abbâs: “El Mensajero de Dios (s.a.w.) clausuró las puertas de la Mezquita a excepción de la puerta de ‘Alî, por lo que pasaba por la misma encontrándose en estado de ÿanâbah, puesto que era su camino y no tenía otro”.25
Dijo ‘Umar Ibn Al-Jattâb en un hadîz sahîh también según las condiciones de los dos sheij (Muslim y Bujârî)26: “Ciertamente que a ‘Alî Ibn Abî Tâlib le fueron concedidas tres cosas, y tener tan sólo una de ellas sería mejor para mí que las riquezas de los árabes (humr an-ni‘am): Su esposa fue Fátima, la hija del Mensajero de Dios; él residió en la Mezquita junto al Mensajero de Dios permitiéndosele lo que le era permitido a él en ella; y se le otorgó la bandera el día de (la batalla de) Jaibar”.27
Un día mencionó Sa‘d Ibn Mâlik algunas de las distinciones de ‘Alî en un hadîz sahîh y en el mismo dijo:28 “El Mensajero de Dios (s.a.w.) desalojó a su tío Al-‘Abbâs y a otros de la Mezquita por lo que Al-‘Abbâs le dijo: “¿Nos desalojas y le permites residir a ‘Alî?”. Le respondió: “No fui yo quien os desalojó y le permitió a él residir, sino que fue Dios quien os desalojó y le permitió residir”.29
Dijo Zaid ibn Arqam:30 “Algunos de los Compañeros del Mensajero de Dios tenían puertas abiertas hacia la Mezquita y el Mensajero de Dios (s.a.w.) dijo: “Clausurad estas puertas excepto la puerta de ‘Alî”, y la gente habló sobre ello. Entonces, se levantó el Mensajero de Dios (s.a.w.), alabó y engrandeció a Dios y luego dijo: “Ciertamente que yo he ordenado clausurar estas puertas excepto la puerta de ‘Alî y alguno de vosotros dijo algo al respecto. ¡Por Dios, que yo no he cerrado ni abierto nada, sino que se me ordenó algo y lo realicé!”.31
Cita At-Tabarânî en su Al-Kabîr de Ibn ‘Abbâs32 que el Mensajero de Dios (s.a.w.) se levantó un día y dijo: “No fui yo el que os desalojó como algo de mi parte, ni el que le dejó a él permanecer, sino que fue Dios el que os desalojó y le dejó. Yo soy sólo un siervo al que se le ordena e hice lo que se me ordenó, y no sigo sino lo que me es revelado”.33
Dijo el Mensajero de Dios (s.a.w.): “¡Oh ‘Alî! No le es permitido a nadie encontrarse en estado de polución ritual (ÿanâbah) en la Mezquita a excepción de ti y de mí”.34
Sa‘d Ibn Abî Waqqâs, Al-Barâ’ Ibn ‘Âzib, Ibn ‘Abbâs, Ibn ‘Umar, y Hudhaifah Ibn Usaid Al-Guiffârî, todos ellos transmitieron:35 “El Mensajero de Dios (s.a.w.) salió hacia la Mezquita y dijo: “Por cierto que Dios reveló a Moisés: “Construye para Mí un lugar de prosternación puro en el cual no residan más que tú y Aarón”, y por cierto que Dios me reveló: “Construye un lugar de prosternación (masÿid o mezquita) puro en el cual no residan más que tú y tu hermano ‘Alî”.36
Este escrito nuestro no puede abarcar la recopilación de todos los textos comprobados transmitidos al respecto por Ibn ‘Abbâs, Abû Sa‘îd Al-Judrî, Zaid Ibn Arqam, el “Compañero de Jaz‘am”, Asma’ bint ‘Umais, Umm Salamah, Hudhaifah Ibn Usaid, Sa‘d Ibn Abî Waqqâs, ‘Umar, ‘Abdul·lah Ibn ‘Umar, Abû Dharr, Abû At-Tufail; Buraidah Al-Aslamî, Abû Râfi‘ el sirviente del Mensajero de Dios, Ÿâbir Ibn ‘Abdul·lah y otros.37
Entre las súplicas transmitidas que fueron expresadas por el Mensajero de Dios (s.a.w.), tenemos: “¡Dios mío! Mi hermano Moisés te suplicó diciendo:
«¡Señor mío! ¡Dilata mi pecho, facilítame mi tarea, y desata el nudo de mi lengua, de manera que mis palabras sean comprendidas, y dispón para mí un visir de entre mi gente, que sea mi hermano Aarón; fortaléceme con él, y asóciale en mi asunto» (Tâ hâ; 20: 25-32),
y le revelaste:
«Te secundaremos con tu hermano y os dispondremos un poder» (Al-Qasas; 28: 35).
¡Dios mío! Ciertamente que yo soy Tu siervo y Tu Mensajero Muhammad; dilata mi pecho, facilítame mi tarea y dispón para mí un visir de entre mi gente, mi hermano ‘Alî…”.38
Similar es lo narrado por Al-Bazzâr en cuanto a que el Mensajero de Dios (s.a.w.) tomó la mano de ‘Alî y dijo: “Por cierto que Moisés suplicó a Dios que purificara el lugar de prosternación (masÿid o mezquita) a través de Aarón, y yo he suplicado a Dios que purificara la Mezquita a través tuyo”.
Luego mandó a decir a Abû Bakr: “Clausura tu puerta” y éste pronunció el istirÿâ’ (la frase: “Ciertamente que somos de Dios y a Él retornaremos”), luego dijo: “Escucho y obedezco”; luego mandó a decir lo mismo a ‘Umar; luego mandó a decir lo mismo a (su tío) Al-‘Abbâs; luego dijo (el Profeta) (s.a.w.): “No soy yo quien ha clausurado vuestras puertas y dejó abierta la puerta de ‘Alî, sino que Dios abrió su puerta y clausuró la vuestra…”.39
Esta cantidad es suficiente para lo que nos propusimos respecto a la similitud entre ‘Alî y Aarón en todas las posiciones y asuntos.
Was Salâm
Sh.